La salud de nuestras mascotas es una prioridad para cualquier dueño responsable, y una de las afecciones más preocupantes que pueden afectar a los perros es la sarna. Este término puede sonar alarmante, pero entender los tipos de sarna, sus síntomas y las formas de prevenirla es clave para asegurar el bienestar de tu perro y tu tranquilidad. En este artículo, exploraremos en detalle los diferentes tipos de sarna que pueden afectar a los perros, cómo identificar sus síntomas y si hay riesgo de contagio para los seres humanos.
¿Qué es la sarna?
La sarna es una enfermedad cutánea causada por ácaros microscópicos que se alojan en la piel de los perros. Estos ácaros son parásitos que se alimentan de la queratina de la piel y provocan una serie de síntomas incómodos para tu mascota. Dependiendo del tipo de ácaro que cause la infestación, la sarna puede manifestarse de diferentes maneras y tener distintos niveles de gravedad.
Tipos de sarna en perros
Existen principalmente dos tipos de sarna que pueden afectar a los perros: la sarna sarcóptica y la sarna demodécica. Cada una de ellas es causada por un tipo diferente de ácaro y presenta síntomas particulares. Además, exploraremos brevemente la sarna otodéctica, una variante que afecta principalmente las orejas de los perros.
1. Sarna Sarcóptica
La sarna sarcóptica, también conocida como sarna canina o sarna contagiosa, es una de las formas más comunes y contagiosas de esta enfermedad. Es causada por el ácaro Sarcoptes scabiei var. canis, que se entierra en las capas superficiales de la piel del perro, provocando una intensa picazón y una reacción inflamatoria.
Síntomas de la Sarna Sarcóptica:
- Picazón extrema: Este es el síntoma más característico. Los perros afectados se rascan de manera constante, lo que puede llevar a la formación de heridas y costras en la piel.
- Pérdida de pelo: Debido al rascado constante, es común ver áreas de alopecia (pérdida de pelo), especialmente en las orejas, codos, abdomen y patas.
- Enrojecimiento y sarpullido: La piel afectada suele estar inflamada, enrojecida y con sarpullido. En casos severos, pueden aparecer costras y piel engrosada.
- Cambios de comportamiento: Los perros con sarna sarcóptica pueden volverse inquietos, irritables y, en algunos casos, deprimidos debido a la incomodidad.
Contagio a humanos: La sarna sarcóptica es zoonótica, lo que significa que puede transmitirse a los seres humanos. Si bien el ácaro prefiere a los perros, en casos de contacto cercano, puede infestar temporalmente a las personas, causando una erupción cutánea con picazón. Sin embargo, el ácaro no puede completar su ciclo de vida en la piel humana, por lo que la infestación es autolimitada y desaparece con el tiempo.
2. Sarna Demodécica
La sarna demodécica, también conocida como demodicosis o sarna roja, es causada por el ácaro Demodex canis. Este ácaro es parte de la flora normal de la piel de los perros, y en pequeñas cantidades no causa problemas. Sin embargo, cuando el sistema inmunológico del perro está comprometido, los ácaros pueden multiplicarse descontroladamente, llevando a una infestación.
Síntomas de la Sarna Demodécica:
- Pérdida de pelo localizada: En sus etapas iniciales, la sarna demodécica suele manifestarse con pequeñas áreas de pérdida de pelo, especialmente alrededor de los ojos, boca y patas delanteras. Estas áreas suelen ser rojizas y escamosas.
- Infecciones secundarias: A medida que la infestación progresa, las áreas afectadas pueden infectarse, provocando hinchazón, enrojecimiento y secreción.
- Piel engrosada: En casos severos o crónicos, la piel puede volverse gruesa y oscura.
- Picazón moderada: A diferencia de la sarna sarcóptica, la picazón en la sarna demodécica suele ser menos intensa, aunque puede aumentar si hay infecciones secundarias.
Contagio a humanos: Afortunadamente, la sarna demodécica no es contagiosa para los seres humanos. Este tipo de ácaro es específico de los perros y no puede sobrevivir en la piel humana. Sin embargo, es importante tratar la enfermedad en el perro para evitar complicaciones secundarias y el malestar de la mascota.
3. Sarna Otodéctica
La sarna otodéctica, comúnmente conocida como sarna de las orejas, es causada por el ácaro Otodectes cynotis. Este ácaro se aloja principalmente en el canal auditivo de los perros, pero también puede afectar la piel circundante.
Síntomas de la Sarna Otodéctica:
- Sacudidas de cabeza y rascado de orejas: Los perros afectados suelen sacudir la cabeza con frecuencia y rascarse las orejas de manera intensa debido a la irritación.
- Cera negra o marrón: Una característica notable es la presencia de una cera oscura en el canal auditivo, que puede tener un mal olor.
- Inflamación del oído: El rascado constante puede provocar inflamación y enrojecimiento del oído, e incluso heridas.
- Pérdida de equilibrio: En casos severos, la sarna de las orejas puede afectar el equilibrio del perro debido a la inflamación del oído interno.
Contagio a humanos: La sarna otodéctica es menos común en humanos, pero puede causar irritación si hay un contacto prolongado con un perro infectado. Sin embargo, el ácaro no prospera en la piel humana.
Diagnóstico y Tratamiento de la Sarna en Perros
Si sospechas que tu perro tiene sarna, es crucial llevarlo al veterinario para un diagnóstico adecuado. El veterinario puede realizar un raspado de piel para identificar los ácaros bajo el microscopio.
El tratamiento depende del tipo de sarna y la gravedad de la infestación. Los métodos comunes incluyen:
- Medicamentos tópicos y orales: Existen productos antiparasitarios que pueden aplicarse directamente en la piel o administrarse por vía oral para eliminar los ácaros.
- Baños medicados: Los baños con champús especiales ayudan a aliviar los síntomas y a eliminar los ácaros de la piel del perro.
- Antibióticos: Si hay infecciones secundarias, el veterinario puede recetar antibióticos para tratar las infecciones bacterianas.
Es esencial seguir el tratamiento hasta el final y mantener una buena higiene en el hogar para evitar la reinfestación.
Prevención de la Sarna en Perros
Prevenir la sarna implica mantener a tu perro saludable y evitar el contacto con animales infestados. Aquí hay algunas medidas preventivas:
- Cuidado regular de la piel y pelaje: Cepillar y bañar a tu perro regularmente puede ayudar a detectar problemas de piel a tiempo.
- Visitas regulares al veterinario: Las revisiones periódicas pueden identificar cualquier problema antes de que se agrave.
- Evitar el contacto con animales infectados: Si sabes que un perro tiene sarna, evita que tu perro interactúe con él hasta que esté curado.
Conclusión
La sarna es una enfermedad incómoda, pero tratable, que puede afectar a nuestros perros. Con una detección temprana y un tratamiento adecuado, tu perro puede recuperarse completamente. Aunque algunos tipos de sarna pueden contagiarse a los humanos, el riesgo es bajo y generalmente se limita a síntomas leves. Mantener a tu perro saludable y bien cuidado es la mejor manera de prevenir esta y otras enfermedades cutáneas. ¡Tu perro te lo agradecerá con una vida llena de salud y felicidad!